lunes, 7 de septiembre de 2009

Tsunami festivalero: el One Show declara la guerra a los truchos.


No sólo los truchos serán censurados -y castigados- por el festival, sino también todos aquellos anuncios publicados una sola vez y pagados por las agencias.

Es muy raro ver truchos que por lo menos no tengan el visto bueno del cliente. Pero anuncios que han sido aprobados sólo para festivales y publicados por la agencia, hay miles. El impacto sobre las inscripciones asiáticas y brasileñas especialmente, será bestial.

Después del escándalo de DDB Brasil y su campaña "Tsumani 9/1" para WWF, el One Show ha cambiado sus estatutos y ha instaurado normas y castigos para las agencias y creativos autores de truchos.

Una de las sanciones para las agencias y creativos que no cumplan las normas, será prohibirles participar durante 5 años.

Medidas un poco infantiles para mi gusto (e hipócritas con el palmarés de años anteriores), pero que demuestran que la industria se está preocupando de un problema que parece estar fuera de control.

Sí me parece un esfuerzo valiente, porque está claro que el mayor perjudicado de todos será el propio One Show y su flujo de caja.

Pero me entran dudas como, ¿qué pasará con aquellos anuncios que sí son creados para publicar una vez, como un saludo de Mapfre a Nadal por ganar el US Open o un anuncio específico para Nochebuena? ¿Y las ONG's que no tienen un duro y que claramente no pagan por sus publicaciones? Los límites son un poco confusos.

¿Qué opináis?

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Excelente noticia para volver de vacaciones! Ojala se extienda...

Anónimo dijo...

creo que en la última edición de Cannes ya se empezaron a premiar piezas que tenían bastante estrategia y que por tanto eran "reales", no hechas sólo para festival.

Es casi imposible en festivales internacionales erradicar los truchos ya que el control se hace muy difícil, la clave está en los jurados y en lo que premian porque más o menos se sabe lo que es "real" de lo que no.

a mi me parece bien que haya más control y se vuelva a premiar las campañas meritorias por creatividad, por estrategia y por impacto en la gente.

saludos a todos.

Anónimo dijo...

Nunca voy a entender este debate de los truchos. Este tipo de piezas les conviene a los organizadores porque justamente recaudan más plata y a las agencias les permiten ganar premios que repercuten en más prensa, y es probable que en más clientes. También les conviene a los creativos porque con esas piezas arman la carpeta para moverse por otras agencias...entonces para que mierda se quejan de los truchos si lo unico que hacen es generar beneficios para todos. Truchos pueden hacer todos ahora el tema es que les salgan a todos.

Anónimo dijo...

si eres buen creativo o buena agencia no te hace falta tirar de truchos...

Anónimo dijo...

Al que dice que los truchos les benefician a todos:

En esa ecuación te dejas a los clientes, que son los que pagan la fiesta, y a los que los premios empiezan a importarles más bien poquito. Nunca entendí que un cliente llamara a una agencia sólo porque ésta hubiera ganado un par de leones con un trucho para una ONG, por poner un ejemplo. Era absurdo, y afortunadamente ya no se está haciendo. De todas formas, es muy complicado perseguir los truchos. Esto solo se acabará cuando se demuestre que han dejado de ser rentables, y para eso ya no queda mucho. Igual es que hay que empezar a currar de verdad.

Anónimo dijo...

los mismos que se rasgan las vestiduras hablando mal de los truchos deberian entender que es parte de un negocio que ayuda a posicionar la imagen de las agencias (a través de los premios) y esta imagen es la que consigue muchas veces nuevos negocios, dentro y fuera de las redes.
el día que mueran los truchos van a morir las carpetas chicos, no quieran ser mas papistas que el papa.
es infinitamente más serio declararle la guerra al sistema de explotacion que se vive en las agencias que a los truchos.

Anónimo dijo...

Nunca voy a entender este debate del dopaje en el ciclismo.
Doparnos es bueno para todos; para los organizadores porque hay más espectáculo, para los patrocinadores porque hay más audiencia y para los ciclistas porque corremos más rápido.

Años después: el ciclismo está destruido, los patrocinadores huyen y los ciclistas han perdido toda credibilidad.

Hacer trampas mola durante un rato, pero antes o después te cogen.
Y hacer truchos es hacer trampas.

Anónimo dijo...

O también:

Nunca voy a entender este debate de las hipótecas subprime.

Son buenas para todos: para los que las contratan porque tienen una casa y para los bancos porque ganan más dinero. ¿Dónde está el peligro? Qué puede pasar?
Entonces para que mierda se quejan de las hipótecas subprime si lo único que hacen es generar beneficios para todos.

¿Sigues pensando que hacer truchos es beneficioso?

Anónimo dijo...

Vamos. El simple hecho de tener al mejor talento de las agencias dedicando más tiempo a los truchos que al trabajo real, no puede ser bueno para la industria.
Es como si en un hospital los mejores médicos estuvieran más dedicados a sanar enfermos imaginarios que a enfermos reales!
Jacinto, si lo piensas, tampoco es bueno y justo el asunto en los concursos: hacer competir a piezas reales con truchos es como tener en una misma carrera a tipos corriendo los 100 metros planos con otros corriendo los 100 metros con vallas.
Saludos a todos, hermanos.

la trufa dijo...

Para mí, los festivales son como el pret-a-porter de la publicidad.

Una pasarela en donde las mentes creativas se lucen al máximo, aunque mucho de lo que muestren (o casi todo, en el caso de la alta costura) luego no lo veamos en la calle.

Si Mark Jacobs puede hacer un desfile alucinante, con vestidos plateados y peinados imposibles, ¿por qué no va a poder hacer camisetas y calcetines?

Creo que el problema puede ser que le damos mucha importancia a los festivales, e intentamos justificarlos mezclándolos con los nuevos negocios de la agencia o con la buena o mala relación con los clientes.

Pues no, viéndolo desde esta analogía, a la gente de la calle (el cliente final) le da igual la última pasarela de Tom Ford. Ellos comprarán TF dependiendo de lo que vean en la tienda. Punto.

Las pasarelas son simplemente una oportunidad para que las firmas vean todo el potencial de los diseñadores y el resto de la gente vea hacia dónde va la industria, aunque luego esos cambios tomen años en producirse (si es que se producen).

Entonces, ¿sirven los premios para algo?